Te pedimos en esta tarea que analices qué tanto por
ciento de tu tiempo dedicas a cada función, según el rol que
desempeñas en tu organización. El resultado ¿es comparable al que se
propone en el gráfico? ¿A qué funciones deberías dedicar más tiempo? ¿Qué
necesitarías para poder hacerlo?
Entiendo que la imagen lo que pretende es establecer, de
alguna manera, la media de tiempo que deberíamos dedicar todos al
intraemprendizaje. Más aún, cuando es necesario fomentarlo, y en lo que
coincido plenamente.
Pero, de algún modo, responder a la pregunta ¿qué tanto por
ciento dedicas a cada función? me parece que es, un poco, encorsetar la
respuesta. Sé que el objetivo es que nos demos cuenta de que todos tenemos que
intraemprender y que para eso necesitamos ponernos estos 5 “sombreros” que se
nos proponen (estrategia, coordinación, gestión, innovación y operación), pero de ahí a dividir nuestro tiempo en cada uno de los roles y
ver si encajamos bien en la foto…
A nivel de Direcciones Generales y alta política sí
entiendo que el gráfico es bastante estable.
Pero a nivel de Jefaturas de Servicio, puestos técnicos (donde
me incluyo) y administrativos, entiendo las proporciones entre roles como algo
más variable. Los roles están ahí y deberíamos utilizarlos todos, cada uno en
la medida que sea necesario y sobre todo, en el momento oportuno, para obtener
el mejor resultado posible de nuestro trabajo y del de nuestro equipo.
Esto, nos llevaría a que:
- Ante la llegada de una nueva tarea/procedimiento/reto… deberíamos, en vez de ponernos a trabajar sin mucha planificación, tomarnos un tiempo para, desde la estrategia, la coordinación, la gestión y la innovación, ser capaces de establecer, entre todos los miembros del equipo, la mejor operación posible: aquella que con el menor esfuerzo nos va a proporcionar los mejores resultados. Por supuesto, si esto no lo hemos hecho nunca, hoy será mejor momento que mañana para abordarlo.
- Y una vez que esa operación está en marcha (la mejor posible), es evidente que en nuestros cerebros deberíamos dejar un hueco diario para la mejora, en cualquiera de los roles establecidos. Y que para que esa mejora incremental pueda materializarse, todos necesitamos libertad para poder proponer y también necesitamos que nos escuchen activamente.
En realidad, esta es la filosofía que aplico en mi trabajo.
Si sé que voy a realizar algo dos o más veces, dedicaré mucho tiempo a la
primera para establecer la mejor manera de alcanzar, desde la estrategia, los
mejores resultados. Y la segunda, con la maquinaria bien engrasada, espero que
sea cuestión de repetición y de pequeños ajustes.
El mayor freno al intraemprendizaje son esos patrones invisibles
pero reales, en los que unos están “para pensar” y otros “para hacer”. Y cuando
a uno que “hace” se le ocurre “pensar”, no se le tiene en cuenta. Este
es un problema tanto organizacional como de las personas y que hay que revertirlo.
Todos estamos para pensar y para eso están los 5 “sombreros”. Así que, ¡a
ponérselos!
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